Tomándose revancha del primer partido, donde había caído en la ciudad de Ekaterimburgo, en esta ocasión Brasil pudo derrotar a Rusia. Lo hizo en la ciudad de Tyimen, con un marcador de 3 a 1.
Nuevamente, el partido no arrancó bien para los sudamericanos, ya que los locales se pusieron en ventaja, casualmente con un gol de un brasileño nacionalizado: Pula, quien convirtió de sexta falta.
En el segundo tiempo, no obstante, todo fue verdeamarelho. Igor, señaló el empate, Betao el 2-1 y Wilde el tercer y definitivo tanto, cuando los rusos ya actuaban con arquero-jugador.
